¡Importante! No enviamos el programa ni la licencia ni el código. Si has perdido datos, piensa en frío, apaga tu ordenador para no sobreescribir nada y acude a un servicio técnico. No harás nada corriendo de un sitio a otro histéricamente, ni halagando nuestro extraño ego con promesas de fama mundial, ni apelando a nuestros sentimientos. No podemos ayudarte por internet: si las pistas que damos no te resuelven nada, es que necesitas ayuda técnica in situ. Lo mejor que podemos hacer por ti es maltratarte para que dejes de andar en círculos y te pongas a buscar ayuda, no recetas mágicas. Aunque quedemos como hijos de la gran perra, cuanto antes te quede claro que debes buscar ayuda y pagar por ella, menos perjudicado saldrás de una pérdida de datos. Y si nunca te ha pasado necesitar de la informática forense, piensa en serio hacer copias de seguridad. Recuerda: los ordenadores no son fáciles de usar, por más que en la publicidad la gente sonría. Véase también este desahogo, y esta explicación de cómo funciona el borrado y el formateado de un disco.

(Para Mac, una pista al final de la nota).

Este fin de semana ha sido de lo más interesante. De la forma más tonta, me ha tocado realizar una evaluación casi completa de productos de data recovery. El portátil de empresa que utiliza mi novia comenzó a fallar el jueves. Al arrancar Windows, el equipo mostraba recurrentemente el mensaje de que no se podía arrancar correctamente, y mostraba las opciones de arrancar con normalidad, arranque en modo seguro, etc... Una vez entregado el equipo a la tienda que les ofrece el mantenimiento, lo revisaron (o eso dijeron), y concluyeron que no había ninguna posibilidad de recuperar la información, con lo cual había que formatear el equipo y reinstalarlo.

Al tener conocimiento de que iban a formatearlo sin haber intentado salvar la información que contenía, solicité el equipo a la tienda para intentar recuperar algún dato, aunque para cuando me lo entregaron, ya lo habían formateado, y habían cancelado a medias una instalación de XP. Mi objetivo era ahora recuperar el archivo .PST con su correo y contactos, y el máximo número de documentos ofimáticos. (La tienda desconoce el concepto de perfil móvil, que hubiera evitado mis experimentos de fin de semana).

Primer intento:  Desmonto el disco duro, y lo monto en una carcasa USB. Tras realizar algunas pruebas con diversos programas de data recovery, veo que la recuperación sobre dispositivos extraíbles no funciona, por lo que vuelvo a montar el disco duro en el portátil.

Segundo intento: Instalo Windows XP y pruebo el Iolo Search and Rescue 3  que con su tecnología StrongScan se anuncia como la herramienta ideal para recuperar información en un disco duro formateado. Pasan unas 40 horas hasta que finaliza el análisis, y no consigue recuperar más que unos pocos documentos ofimáticos.

Tercer intento: Pruebo el File Scavenger 3 y el resultado es similar, si bien, este solamente tarda unos 15 minutos en realizar el escaneo del disco duro.

Cuarto intento: Utilizo Recover My Files 3.7.. En 10 minutos es capaz de localizarme numerosos archivos, entre los que aparecen varios archivos .PST, aunque al intentar de salvar los ficheros, me los almacena con tamaño de 1Kb.

Quinto, sexto, séptimo,.... intento: Continuo intentándolo con el Ontrack Easy Recovery 6, el Stellar Phoenix, el Runtime GetDataBack, Recover LostData y todo aquel programa que remotamente pueda tener alguna funcionalidad similar.

Último intento: Pruebo una versión anterior de Recover My Files, en concreto la 2.90. En algo menos de 30 minutos es capaz de recuperar más de 5 ficheros .PST además de bastantes documentos ofimáticos, e innumerables imágenes. En esta ocasión, el programa si que permite almacenar los ficheros correctamente, y consigo salvar más de 200Mb de información. Entre la información recuperada, encuentro un par de archivos Excel bastante curiosos que parecen inventarios de portátiles con hojas tituladas Aspen, Davos y DM. Umm, esto suena a reuniones del G8. ¿Será que en alguna imagen de sistema de HP a alguien se le colaron estos ficheros? ¿Será acaso que HP vende portátiles usados como si fueran nuevos?

Algunos de los ficheros PST estaban corrompidos, pero he conseguido solucionar esto mediante el scanpst que incluye Microsoft Outlook.

En resumen: Ordenador encendido durante casi 72 horas seguidas, evaluación casi completa de todo el software de recuperación de datos del mercado, recuperado todo el correo, contactos y calendario hasta la semana pasada, así como 100Mb de documentos ofimáticos. Si alguna vez os ocurre alguna cosa similar, sin ninguna duda, RecoverMyFiles es la solución adecuada.

Postdata de Acidonitrix: dice Fede que para "recuperar en Mac OS X 10.4 deberias usar Data Rescue, un completitismo y facil de usar soft de restore de datos". ¡Gracias a Fede por completar la información!, y a Guillermo y Roberto por sus comentarios

Escuchando: Manoa - Jumera Drive. Dubai Chill Lounge Vol.2 (2006)

El Sr. Martínez contaba el mes pasado que hay un blog por ahí en el que retratan personas sonrientes encantadas con su trabajo y por hacerlo bien. El sitio se llama Gokurousama, en japonés "Gracias por tu trabajo", y las personas que salen no ostentan precisamente trabajos envidiables: repartidores, electricistas, basureros, cocineros, obreros de la construcción, gente de oficio. Nada glamuroso: no hay diseñadores, gurús, brokers, bloggers molones ni nada por el estilo.

Encontrar la satisfacción personal en el trabajo es un reto de cada cual, no siempre fácil teniendo en cuenta que es bastante probable que no encuentres trabajo en tu vocación ni relacionado con tus estudios. Ahora bien, suponiendo que al menos dispongas de unas condiciones dignas, y que no sea un trabajo penoso o desagradable (y aún así deberías intentarlo), no queda más remedio que hacerse amigo del dragón. A saber:

El jesuita hindú Anthony de Mello contaba una historia que dice más o menos así:

Un tipo va al psicológo porque no puede dormir aquejado de pesadillas horribles:

- Doctor, no puedo dormir porque tengo pesadillas en las que sueño que un dragón me quiere devorar. Me despierto sobresaltado y no puedo conciliar el sueño porque me da miedo dormirme de lo mal que lo paso.

- Hum, esto tiene cura, pero el tratamiento le costará cinco mil dólares.

-¡Cinco mil dólares! Olvídelo, que ya me haré amigo del dragón.

[Tony de Mello fue un jesuita hindú que allá por los ochenta publicó un montón de libros con chistes y anécdotas de todo el mundo buscando provocar la reflexión, no necesariamente desde un punto de vista religioso. Posteriormente, Claudio Coelho saqueó la idea, la desvirtuó de su fuerza, le dio un tonillo de buen rollito y la hizo asequible al desaliento y los espíritus débiles]

Nota introductoria para nuestra nueva sección de gestión de empresa comparada e historia militar.

"Los negocios son la guerra"

Esta frase, atribuida al CEO de Sony Akio Morita, es quizá apócrifa, pero refleja un interesante enfoque de los negocios. Si bien puede entenderse como la descripción negativa de una política industrial agresiva, es más adecuado analizarla como el aprovechamiento de las enseñanzas de los grandes conflictos bélicos para trasladarlas a una competición. O de otra forma, para analizar cómo se gana y cómo se pierde y ser capaz de elegir una estrategia, establecer unas métricas y predecir el resultado, puesto que no tiene sentido emprender un negocio ("guerra") si no se está seguro de ganar (aparente perogrullada de Sun Tzu, pero de gran calado especialmente por la cantidad de veces que es ignorada). Es importante analizar los matices: ganar, sacar un beneficio, no implica necesariamente la derrota del otro, sino el correcto desempeño de las habilidades propias en la consecución de un objetivo claro. También es cierto que determinadas estrategias no buscan la "victoria" sino el desgaste y erosión, es decir, el beneficio inherente de provocar el conflicto como un medio de evitar que nadie gane.

Se cuenta que, interrogado por las consecuencias de la Revolución Francesa de 1789, el primer ministro chino Zhou Enlai dijo que era demasiado pronto para sacar conclusión alguna (habían pasado sólo 150 años). Es decir, que para extraer conclusiones sobre el resultado final de un acontecimiento, es necesario observarlo desde la distancia que proporciona el tiempo. Distancia que, además de lo temporal, implica el conocimiento de los datos a lo largo del tiempo y la capacidad de conocer la evolución de las consecuencias de un acontecimiento en ciclos largos.

Las modas de gestión de empresa y los libros de autoayuda para directivos (es decir, obras de los gurús del management) son, por su propia definición, pasajeros y propios de un sector en constante cambio. Un directivo cambia de puesto mucho antes de que su política dé unos resultados definitivos y que tenga tiempo de desarrollarse completamente. En otras palabras, la vida media de un directivo en su puesto es mucho más corta que el tiempo necesario para que una política dé todos sus frutos. Para bien o para mal, los periodos de ejecución están artificialmente reducidos y supeditados a un ciclo legislativo (y de generación de ingresos) cuando debería ocurrir al contrario.

En Simbiontes mantenemos una sección dedicada a la Historia Militar que refleja nuestro interés en la materia. La Segunda Guerra Mundial es, especialmente, un conflicto apasionante. Media Humanidad estuvo preparándose durante años para, durante un lustro (más aún en el caso de Japón y China) exterminar al cinco por ciento de la población de la época, modificar el mapa, cambiar el colonialismo europeo por el de las multinacionales, sustituir unos imperios por otros y, de paso, provocar un terremoto social que dejó un mundo irreconocible. El concepto de guerra total y la movilización masiva, la supeditación de las economías y políticas a un único objetivo, dieron (por desgracia) la mayor empresa colectiva emprendida por la Humanidad. Cinco bloques (Alemania e Italia, los aliados occidentales, la URSS, China y Japón) pusieron en práctica políticas y técnicas de gestión diferenciadas para alcanzar el mismo objetivo, con resultados finales que se propagaron hasta los años 90.

Y todo esto, ¿a qué viene?

A nota por tópico, de aquí al verano septentrional hablaremos de:

• Estilos de liderazgo macroscópico: Churchill, Hitler, Roosevelt y Stalin.
• Estilos de liderazgo y organización según Geofrey Regan en su "Historia de la incompetencia militar".
• La gestión logística en la Segunda Guerra Mundial.
• El ejército de ciudadanos (1942-1945).
• Burócratas frente a guerreros, o la gestión de la industria en 1936-45, y en qué se parece esa gestión a los modelos de gestión para la calidad del software (CMMi, IT Mark, y... SAP).
• Estilos de liderazgo microscópico: Jack Aubrey (personaje ficticio del siglo XVIII-XIX).
• El análisis estadístico de la Segunda Guerra Mundial y cómo lo aprovecharon israelíes y japoneses.
• Cómo los árabes hicieron inútil la estrategia militar israelí en 1973.
• La doctrina antitanque norteamericana y su estrepitoso fracaso. (Cómo modelar la realidad a gusto de cada cual y liarla parda).
  
• Técnicas artilleras de los contendientes de la SGM o cómo emplear la misma herramienta con distintos medios a tu disposición.
  
• ¿Cómo pudimos hacer eso? O cómo fue posible que el mundo se viera arrastrado a la Segunda Guerra Mundial. Cómo pensaba la opinión mundial en 1900-1946. Entre tanto maremagum de historias épicas, no viene mal una reflexión.

Después de los álbumes digitales, el servicio de moda este semestre en Internet es el alojamiento de videos. Algunas personas han buscado la manera de guardar esos vídeos sin demasiado engorro. Puedes elegir entre...

• ... que te enseñen a pescar con caña. Cómo descargar vídeos. Este tutorial en therror es interesante para  quien desee experimentar el cambio de formatos y comprender cómo funcionan los sistemas de alojamiento de vídeo.
• ... que te den el pescado listo para comer; bueno, tú solo tienes que calentarlo, pero te lo dan limpio y eviscerado. Descargar videos de YouTube, Google Video y iFilm directamente (y cambiar de .flv a otro formato). Este otro sistema propuesto por Javi Moya es más sencillo porque se toma el trabajo por ti. Basta con que copies la dirección del vídeo, la pegues en un casillero y lo guardes (para luego convertirlo). Con que prestes atención durante medio minuto y te leas las instrucciones en vez de pulsar enlaces atolondradamente, tendrás tus codiciados vídeos. (Y, por cierto, cambiando la extensión a .avi puedes probar a abrirlo con VLC directamente sin conversión alguna, con bastantes probabilidades de éxito).
  

Por qué es tan complicado. A veces se quiere grabar una de esas piezas y resulta difícil, porque es streaming, lo que significa que no hay un fichero, sino un "caudal" de información que tú vas leyendo con un reproductor (algo así como oir la radio). El uso de streaming resulta propicio por diversas razones: racionamiento de ancho de banda, control sobre la emisión, rendimiento publicitario. El problema es que lo que te llega al PC no es un fichero, sino algo que el reproductor te muestra y enseguida descarta, pues de lo que se trata es que cada vez que lo quieras ver, tienes que ir a verlo al repositorio original. ¡Cada visita cuenta para la publicidad!

Ahora bien, como quiera que de ese caudal se guarda un fichero temporal para que el reproductor pueda repetirlo y avanzar/retroceder, siquiera mientras lo mantienes abierto, lo que hacen algunas personas es localizar ese fichero temporal, y, con un programa convertirlo a algo más legible y guardable.

Decían el martes pasado en Hispasec que "Kama Sutra", ese virus tan mediático y fácil de convertir en contenido para los medios de comunicación, ha recibido una atención desmedida.

"Kama Sutra", tan mediático como... ¿inofensivo?

[...] Sin embargo, pese a ser un virus de lo más común e incluso poco difundido en comparación con otros, hemos visto hasta noticias dedicadas en la televisión.

[...] este virus resulta mucho menos dañino que otras amenazas mucho más peligrosas a las que nos enfrentamos todos los días. Unos documentos siempre pueden recuperarse si se tiene una copia de seguridad, pero [...] nunca se podrá deshacer el daño si esos documentos confidenciales han sido robados a través de una de las miles de puertas traseras que instalan otros virus; nunca podrás saber si se ha usado tu contraseña robada a través de las decenas de keyloggers que aparecen todos los días; y no es más grave que el inespecífico y potencial daño que se vuelca en la red si tu ordenador se convierte en un zombie que envía correo basura o participa en el ataque coordinado a otros servidores... Esto son amenazas reales y continuas a las que los medios generalistas no han prestado atención.

Como ejemplo de distorsión de la realidad, no está nada mal. Ni siquiera han empleado el nombre más común del virus, sino el más resultón. Cabe empezar a pensar si la calidad del resto de noticias será semejante, sólo que no nos damos cuenta. Es importante este ejemplo, porque no se le puede achacar una tendencia política, y la industria del ramo (antivirus) es muy pequeña como para fabricar una noticia, que por demás sí afecta negativamente al resto del sector tecnológico al presentarlo como vulnerable frente a una amenaza, con nombre chistoso para más inri.

Hace unos años trabajaba en una revista. Un periodista de la prensa provincial se interesó por nuestro trabajo cuando estábamos empezando, y nos dijo que hacíamos las cosas al revés que todo el mundo. Según él, dábamos más importancia al texto que las fotos, que son (a tenor de la ortodoxia imperante) el centro del artículo, fácil de asimilar, y que capta la atención. Ahora bien, una foto está sujeta a interpretación, es parcial fuera de su contexto, y nunca contará la historia, porque es un momento puntual, sin pasado ni futuro. Así que estamos en lo de siempre: fondo frente a forma. Al final, lo que cuenta es el esfuerzo. Desconfía de los caminos fáciles, hasta a la hora de informarte. El espectáculo no cuenta ni puede contar.

Saul Bass, inventor de los títulos de crédito (1920-1996).

Dicen que antes de que Saul Bass hiciera títulos de crédito, el telón no se levantaba en el cine hasta que la película había comenzado. Al público se le dejaba escuchar la música, pero no veía discurrir los títulos. Parecía no importarle a nadie.

Si bien es razonable pensar en encontrar precursores, a Bass se le atribuye la dignificación y transformación de los títulos de crédito como un arte, un componente más de cada película, que adelanta, cuenta, introduce o insinúa la historia del filme. Creó una escuela de animaciones inteligentes y sutiles. Marcó un estilo abstracto, de tipografías manuscritas, con una marca personal específica y característica. Tanto, que los primeros fotogramas de una película bastan para saber que los créditos son suyos. Su trabajo sigue vigente, desde Carmen Jones (1954) hasta la impactante secuencia inicial de Casino (1996). Brutal y sorpresiva como el final de la película de Scorsese, esa secuencia de inicio es el exponente moderno que resume las metáforas profundamente enhebradas con las películas para las que Bass trabajó.

Bass también se dedicó al diseño gráfico en general, creando numerosos logotipos con un alto índice de reconocimiento de marca, y dirigió alguna que otra película. Viendo la lista de compañías para las que trabajó y las películas en las que participó, reconocerás su trabajo enseguida.

La biografía de Bass y el diverso anecdotario está bien recogido en numerosos lugares:

• En notcoming.com hay un repaso a todas sus secuencias y algún que otro ensayo. [Si navegas con pestañas, es conveniente abrir la página en ventana nueva]. Cada una de las secuencias de títulos que hizo Bass es analizada y puedes verla avanzando fotogramas pulsando el botón izquierdo del ratón.
• Anatomía de un asesinato, es una de mis secuencias Bass preferidas. Tiene además una de las mejores bandas sonoras que conozco (la edición remasterizada en 2000 de la banda sonora de Duke Ellington es un puntazo, especialmente las versiones en mono. No es difícil conseguirla en España).
• Tempestad sobre Washington (Advice and consent), una película que gustará a los seguidores del Ala Oeste de la Casa Blanca por cómo muestra los entresijos de la política norteamericana, si bien el final es amargo, y el ritmo es pausado (más propio de esa época). La metáfora del capitolio abriendo su cúpula para revelarnos sus secretos sórdidos, y, en el final, cerrándose como la tapa de un sarcófago, tiene una fuerza tremenda.
• Saul Bass en la wikipedia. Como siempre, una fuente de recursos. Hay muchos logotipos creados por Bass.
• Y, como curiosidad, el título de crédito llevado al extremo. Si bien no intervino Bass, la inversión de recursos creativos en los títulos de crédito llegó más lejos que nunca con los dibujos animados de la Pantera Rosa. Originalmente realizados para las películas de Blake Edwards, acabaron siendo un spin-off a cargo de Friz Freleng. http://en.wikipedia.org/wiki /Pink_Panther#Cartoons. En castellano, el artículo de la Wikipedia sobre la Pantera Rosa es breve en comparación, pero aporta más sobre este asunto.
• Cabe mencionar, por último, los títulos de crédito finales de los Caballeros de la Mesa Cuadrada. Tampoco de Bass, pero vienen a cuento.

Configurar la rueda del ratón en un touchpad

Un touchpad es el sensor táctil que llevan la mayoría de los portátiles y sirve como sustituto del ratón. Funciona detectando la capacitancia de los dedos. El portátil que uso para trabajar tiene una escala a la derecha que indica el área en la que, moviendo el dedo de arriba abajo, se emula la rueda del ratón y haces, por ejemplo, un scroll de pantalla. Pensaba que era un adorno hasta que descubrí lo que era en realidad. Lo que no sabía, y he descubierto casualmente en otros portátiles, es que es un comportamiento habitual aunque no venga indicado. Ese comportamiento puede configurarse. Veamos cómo:

Decíamos hace exactamente un año que hoy es el día de la marmota. Punxsutawney Phil en Simbiontes.

El programa Energy Star de la Unión Europea tiene una interesante calculadora de consumo eléctrico para ordenadores con la que se pueden hacer estimaciones de costes. También es interesante para saber cuánto cuesta dejar un equipo encendido. Es un frame; la página principal es esta: http://www.eu-energystar.org/es.

Leído en el especial Time de energías renovables (un monográfico lleno de anuncios de petroleras).

Los coches están diseñados para circular con un consumo eficiente a 100Km/h (la velocidad crucero). Por encima de esas velocidades, la eficiencia en el consumo cae entre un 7 y un 23%. Calcula tú mismo lo que te cuesta.

Puesta a punto. Un coche en buen estado es más eficiente. Por ejemplo:

• Filtros de aire limpios: hasta un 10% menos de consumo.
• Neumáticos correctamente inflados: hasta un 3% menos de consumo.

Por supuesto, el coche que elijas no debería consumir desorbitadamente. Si piensas que un 4x4 gasta más, consume más, ocupa más, pero a cambio es más seguro, deberías saber que, desde hace un lustro, esa opinión está en tela de juicio.

Iluminación doméstica
Comprar una bombilla incandescente es quince veces más barato que una de bajo consumo, Sin embargo, la bombilla de bajo consumo gasta la cuarta parte menos, y dura hasta trece veces más. Si te preguntas cómo es posible iluminar igual con la cuarta parte de energía, haz lo siguiente. Enciende una bombilla incandescente (de las de toda la vida). Vuelve a los diez minutos y pon la mano. Haz lo mismo sobre un fluorescente. La bombilla de Edison tiene 120 años y como tal es un vestigio de la revolución industrial extremadamente ineficiente, cuyo propósito principal NO es iluminar si no que, en la práctica, es... calentar.

Calefacción
Quizás no es de tu responsabilidad, pero una tira aislante de tres euros colocada en puertas y ventanas ahorrará bastante calefacción y redundará en el aire que respiras.

La cocina
Tapar correctamente los alimentos húmedos para evitar que se forme escarcha mejora el rendimiento del frigorífico, que consume hasta el 9% de la energía del hogar. También ayuda que las cazuelas ajusten a los fogones, calentar con el microondas, no lavar con la lavadora a medias, etc.

El ordenador
Quizás tu PC esté descargando películas todo el tiempo, pero deberías plantearte que el monitor consume mucho. Si en la oficina dejas tu equipo encendido, deberías saber que un PC normal de oficina con un monitor CRT de 17 pulgadas consume 1.400 KW sin apagarlo, y 600 KW si está encendido 10 horas. Ya sabemos que no es tu dinero, pero es que aquí no hablamos de dinero, sino de lo que este no puede pagar, y de que el verdadero limitante no es financiero, sino las materias primas.